En esta ruta salimos 4, Juan Antonio, Carlos, Recluta 13 y yo, al tener que salir otra vez desde Perorrubio el camino que cogemos es parecido al que ya habíamos hecho la semana pasada, por lo menos hasta llegar a Sotillo.
Antes tuvimos que para reparar la bici de Recluta 13, ya que como de costumbre no había revisado, menos mal que tenemos buenos mecánicos en el grupo...
Íbamos sin rumbo fijo por lo que con permiso del jefe, pasado ya Sotillo propongo enseñarles el camino de subida a La Pinilla, como además da pie a acortarle en caso de hacerse tarde, nadie pone impedimento, por lo que nos dirigimos a Sotos de Sepúlveda y desde hay por carretera poco transitada hacia la N-110.
La cogemos durante 100 metros y cogemos el camino que sale a la derecha que nos lleva a una valla que hay que saltar; el camino al principio esta más seco de lo que yo pensaba y eso en principio era bueno... pero empiezan a aparecer rodadas de un todo terreno y hace que la subida sea algo más complicada, ya que hay que ir entre ellas y salirse de ellas y volcar es supersencillo.
Llegamos a la cañada y respiramos todos... no ha habido ningún percance; desde aquí se ven ya las pistas de esquí lo cual nos anima a pesar de tener un cuestón por delante, la ultima vez que subí por el tenia que ir por los trozos que había limpios de nieve, me traen los recuerdos que aquella ruta (2008-12-17. A la nieve. ).
Ver 2009-03-21 en un mapa más grande
No había comentado que Juan Antonio tenia prisa por llegar al pueblo, y nos esta llevando a mata caballo, vamos aguantando como podemos, yo estirando el cuello que me voy a descoyuntar, Carlos con una respiración que parece que se quiere llevar todo el oxigeno para él, y al Recluta ni tan siquiera se le oye.
En un cruce de caminos, antes de llegar arriba decimos ir hasta Santo Tome, era lo mejor a ese ritmo no hubiéramos durado mucho, atravesamos la carretera y cogemos el camino que va faldeando por la sierra, de hay después de algún despiste llegamos a la para obligatoria.
De Santo Tome salimos despistados y nos metemos más carretera de lo deseable, y en Siguero volvemos a lo nuestro los caminos, cogemos el que va directo a la urbanización de Los Cortos, un cuentón que vuelve a poner a cada uno en su sitio, de hay a Santa Marta con una ultima cuesta, en la que siempre que se esta fuerte se sube el ritmo, arriba nos volvemos a reagrupar pensando que ya nos lo tomaríamos con calma, pero sorpresa se vuelve a acelerar y hasta el Condado hay que llevar plato para que no te dejen atrás.
Al llegar todos contentos por la ruta y el grado de dificultad que le habíamos metido 18Km/h de media.
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Antes tuvimos que para reparar la bici de Recluta 13, ya que como de costumbre no había revisado, menos mal que tenemos buenos mecánicos en el grupo...
Íbamos sin rumbo fijo por lo que con permiso del jefe, pasado ya Sotillo propongo enseñarles el camino de subida a La Pinilla, como además da pie a acortarle en caso de hacerse tarde, nadie pone impedimento, por lo que nos dirigimos a Sotos de Sepúlveda y desde hay por carretera poco transitada hacia la N-110.
La cogemos durante 100 metros y cogemos el camino que sale a la derecha que nos lleva a una valla que hay que saltar; el camino al principio esta más seco de lo que yo pensaba y eso en principio era bueno... pero empiezan a aparecer rodadas de un todo terreno y hace que la subida sea algo más complicada, ya que hay que ir entre ellas y salirse de ellas y volcar es supersencillo.
Llegamos a la cañada y respiramos todos... no ha habido ningún percance; desde aquí se ven ya las pistas de esquí lo cual nos anima a pesar de tener un cuestón por delante, la ultima vez que subí por el tenia que ir por los trozos que había limpios de nieve, me traen los recuerdos que aquella ruta (2008-12-17. A la nieve. ).
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No había comentado que Juan Antonio tenia prisa por llegar al pueblo, y nos esta llevando a mata caballo, vamos aguantando como podemos, yo estirando el cuello que me voy a descoyuntar, Carlos con una respiración que parece que se quiere llevar todo el oxigeno para él, y al Recluta ni tan siquiera se le oye.
En un cruce de caminos, antes de llegar arriba decimos ir hasta Santo Tome, era lo mejor a ese ritmo no hubiéramos durado mucho, atravesamos la carretera y cogemos el camino que va faldeando por la sierra, de hay después de algún despiste llegamos a la para obligatoria.
De Santo Tome salimos despistados y nos metemos más carretera de lo deseable, y en Siguero volvemos a lo nuestro los caminos, cogemos el que va directo a la urbanización de Los Cortos, un cuentón que vuelve a poner a cada uno en su sitio, de hay a Santa Marta con una ultima cuesta, en la que siempre que se esta fuerte se sube el ritmo, arriba nos volvemos a reagrupar pensando que ya nos lo tomaríamos con calma, pero sorpresa se vuelve a acelerar y hasta el Condado hay que llevar plato para que no te dejen atrás.
Al llegar todos contentos por la ruta y el grado de dificultad que le habíamos metido 18Km/h de media.
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